Tras unos años en el mercado, la Automatización Inteligente ha dejado de ser un concepto marketiniano para convertirse en una realidad. Pero esa realidad no es tal para gran parte de las empresas. ¿Se extenderá la aplicación de soluciones de automatización a gran parte de las empresas? ¿Seguirán evolucionando las soluciones técnicas? ¿Será realmente el año 2022 el año de la Automatización Inteligente?
Generalmente el objetivo principal que lleva a las empresas a implementar una tecnología de automatización de procesos es reducir la cantidad de tiempo y esfuerzo requerido por las personas para ejecutar operaciones repetitivas y que consumen mucho tiempo.
Los robots de software pueden hacerse cargo de actividades rutinarias que de otro modo serían realizadas por personas, disminuyendo los errores, ahorrando dinero y liberando recursos para centrarse en las tareas más esenciales que requieren interacción humana.
Con la combinación de inteligencia artificial (IA) y tecnologías de machine learning (aprendizaje automático), la industria de la automatización está en auge. Cuando las empresas utilizan la automatización de procesos, pueden asignar mejor sus recursos y maximizar su retorno de la inversión.
Vamos a analizar los elementos clave que pueden hacer que estas tecnologías despeguen definitivamente y sean de uso cotidiano en todas las empresas, rompiendo así las barreras que en ocasiones se les imponen. Estos elementos definirán si la automatización será de uso común en las empresas.
La Seguridad como prioridad
Las arquitecturas de los sistemas de RPA están diseñadas para que cifren (AES-256) todas las conexiones y comunicaciones entre los componentes de cada solución, así como el acceso seguro a los repositorios de credenciales. Además, el uso que de las aplicaciones y sistemas que hacen los robots, está sustentada en la seguridad que se implementa a nivel de usuario. Es una de sus virtudes, no cambiar aplicaciones y que el robot sea como un trabajador más. Sin embargo, la estrategia de los ciberdelincuentes se centra en comprometer a los robots para poder gestionarlos. En este caso el robot seria una marioneta en manos de aquellos que han logrado traspasar las medidas de seguridad, y podría ocasionar graves perjuicios a las empresas.
El problema aquí no solo surge en la ejecución de las transacciones que puedes ser pervertidas, sino en los datos que se manejan, cuentas bancarias, identidades, compras de productos, información médica, etc. Por eso es clave asegurar que se dispone de uno sistemas de gestión de la seguridad que incluyan también a los robots.
Mejorar la escalabilidad
Hace tiempo que las empresas ya no hacen pruebas de concepto o pilotos para validar la tecnología. La tecnología ya está probada, funciona y da resultados. Sin embargo, a veces ocurre que, una vez realizadas las primeras automatizaciones con éxito, se ralentiza el ritmo y el numero de procesos a automatizar. Es aquí donde las soluciones de RPA se están complementando son capacidades de minería de procesos, módulos de ayuda al análisis y cribado de procesos que hacen menos necesaria la participación de consultores de procesos para seleccionar los procesos a automatizar. La clave está en obtener la mejor información para poder realizar un caso de negocio positivo.
Otra de las claves de la escalabilidad, son la reutilización de componentes, las mejoras en la operación de robots, la gestión de procesos mediante niveles de servicio y el empleo de orquestadores avanzados que simplifiquen y optimicen la los costes de operación y mantenimiento.
La Gestión del cambio
Uno de los frenos a la extensión de la automatización es la resistencia de las personas al empleo de la tecnología de automatización por miedo a perder sus puestos de trabajo. Si concebimos la automatización como un cambio estratégico, debemos acompañar al despliegue de la tecnología un proceso continuo de gestión del cambio. Esta gestión del cambio nos permitirá, por un lado, evangelizar a las áreas implicadas en la automatización para extraer el máximo provecho de la tecnología. Y también, evitar el rechazo, y que éste se transforme en apoyo o, al menos, no tenga un efecto negativo la mejora de la productividad y en sume para el éxito de este tipo de iniciativas. Alinear voluntades es clave de éxito en cualquier proceso del cambio, y más en los proyectos de automtización.
La automatización es un cambio en el modelo de operación
Cada vez más empresas están redefiniendo sus iniciativas de automatización. De ser soluciones específicas para problemas concretos, se están trasladando a una visión estratégica. Estas estrategias están definiendo no solo que tareas van a realizar las personas, y cuales los robots, y sus modelos operativos, sino que están definiendo los modelos de centros de excelencia (CoE), es decir, su organización y si son centralizados, distribuidos o federados. La automatización como visión estratégica está cambiando radicalmente la velocidad de implantación de los proyectos de automatización.
Mejores Prácticas
Como cualquier tecnología madura, la automatización de procesos dispone de mejores practicas en todo su ciclo de vida. Por eso es necesario que las empresas, y en concreto, los equipos de TI unifiquen estas mejores prácticas con las ya existentes, y no reinventen la rueda. Ya hay estándares en el mercado. Por eso es necesario que las empresas implementen una definición clara del modelo de gobierno, como se van a gestionar el análisis de procesos, el desarrollo de la automatización y el servicio de operación de robots. La definición y control de las mejores prácticas contribuirán al éxito y la reducción del mantenimiento de las automatizaciones, y, por tanto, a su implantación cada vez mayor en las empresas.
Servicios de automatización e integradores
El número de fabricantes de soluciones de automatización, así como de proveedores/integradores está creciendo. Existen proveedores boutique especializados en determinadas soluciones y grandes proveedores generalistas. En definitiva, profesionales para todos los gustos y tipos de empresa. El problema, común a todos, es el de disponer de profesionales expertos en cada una de las soluciones de automatización. La falta de estos profesionales está inflacionando el sector. Si a esto le añadimos el incremento de las empresas que van a implantar soluciones de automatización que se espera para el año próximo, podemos estar en la antesala de una carencia de capacidades para hacer frente al volumen de proyectos.
Muchas compañías, incluso universidades y centros de negocio están implementado ciclos de formación en automatización como primeras medidas. Un problema adicional es disponer de la experiencia, más allá del conocimiento.
Reducción del número de fabricantes
En los últimos años estamos viendo como los grandes fabricantes de software están realizando compras de pequeñas empresas de RPA y de inteligencia artificial. La aparición cada año de nuevos fabricantes va a ir siendo regulado por el mercado. Algunos desaparecerán, otros serán comprados e integrados en otras soluciones de mercado y otros, los menos, se fusionarán entre sí con diversas estrategias de convergencia.
Evolución tecnología
Los fabricantes de soluciones de automatización cada vez incluyen nuevas funcionalidades de cara a complementar sus capacidades en todo el ciclo de vida de la automatización. Incluyen funcionalidades como son la minería de procesos o de tareas, funciones de BPM, capacidades de inteligencia artificial o capacidades de integración con servicios de inteligencia artificial, capacidades de analítica de datos, etc. Así las soluciones tratan de cubrir cada vez más necesidades funcionales y operativas.
Crecimiento de la industria.
La pandemia ha puesto de manifiesto que las empresas que disponían de procesos automatizados mediante robots han podido seguir funcionando sin interrupciones. Esta situación ha robustecido la confianza en los procesos automatizados.
Los robots de software y las soluciones inteligentes (IA) se han vuelto más vitales en los últimos años para sobrevivir y prosperar. En estos tiempos de pandemia y postpandemia, las organizaciones deben adaptarse a las circunstancias, y aprovechar esta tecnología como una ventaja competitiva y mejorar, así el servicio a los clientes, y mejorar la eficiencia interna.
En definitiva, todos los condicionantes que pueden hacer que la automatización forme parte del núcleo de las empresas están dispuestos. El tiempo decidirá que ocurrirá.
Marcos Navarro Alcaraz
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